miércoles, 15 de febrero de 2006

Confianza
Cierto día estaba hablando con mis amigos del barrio y uno me dijo que confiaba mucho en mí y yo le contesté que no lo creía, y le dije bromeando: “no creo que confíe en mí hasta el punto de dejar que yo le ponga un cuchillo en la garganta” y él me contestó: “¡claro que sí!”. En ese momento saqué mi cuchilla que siempre andaba y sonreí malévolamente, entonces él levantó la cabeza y me mostró el cuello, yo seguidamente le coloqué la punta del cuchillo en ella (según yo bromeando) y él ni siquiera se inmutó
Vi en ese momento la calidad de amigos que tengo, puso su vida en mis manos, confió plenamente en mí.
No lo he vuelto a ver hace muchos años, espero que esté bien